Claro que sí, me conmuevo con la desgracia y tristeza de todos mis semejantes, pues aunque sean amistades o enemistades virtuales, son gente de carne y hueso como tú y yo.
La empatía es tener la capacidad de ponerse en los zapatos de los demás, aunque no exista una amistad o aunque te caigan mal.
Solo la gente de corazón limitado se conmueven exclusivamente por quienes le caen bien.