Mi gran amigo José Luis Briceño, ya de 62 años caminaba con un bombón de 24 añitos. Nos encontramos y hablamos un rato, en una panadería. En cuanto ella se retiró al baño, le pregunté: ¿Compadre, cómo hace usted para hacer feliz a semejante hembra?
Mi querido amigo, con la mayor calma me dijo: Me he dado cuenta de que para mantener una óptima y excelente relación con cualquier mujer, lo más importante es ¡DÓNDE LE DAS LOS BESOS!
Me quedé asombrado e inmediatamente, con ansiedad morbosa le pregunté: Y bueno compadre, ¿dónde la besa usted?
Sin perder su compostura, mi compadre me respondió: la beso en París, Londres, Madrid, Roma, New York, Miami, Las Vegas, Cancún, Abu Dhabi, Dubai, Hong Kong.
Jajajajajajajajajajajajajá.
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