¿SABEN QUE LES LLORÉ, LES LLORO Y LES LLORARÉ?
Una puerta se cerró entre mi realidad...
Sabía que se habían ido, pero quería retenerlos entre mis lágrimas.
Al cerrar la puerta de mi habitación, me encerré para Ustedes, para llorarles y con esas lágrimas acariciar mi corazón destrozado.
Mis lágrimas, eran mi tubo de escape, a la realidad de la que me quería despertar.
Les lloré incansablemente, no importando donde estuviese.
Hoy les lloro y nadie puede condenarme por eso, pues nadie puede sentir lo que yo siento.
Y aunque sus intenciones sean buenas, al querer animarme, mis lágrimas les pertenecen, mi tiempo de llorarles es de Ustedes.
Por eso les sigo llorando, porque la reserva de lágrimas que tengo para Ustedes, no hay cielo que las cubra.
Y les seguiré llorando, porque tengo derecho a eso, porque lo merecen que lo siga haciendo, porque es uno de los mejores tributos que les rindo.
En ese mar de lágrimas encuentro la paz, que el ruido del mundo me niega. En esa intimidad de amor, les vuelvo a encontrar aunque les siga llorando.
.