Te lo pregunto, porque yo:
A pesar de todo: SONRÍO, aunque la vida me golpeé, aunque no todos los amaneceres sean hermosos, aunque se me cierren las puertas. Sonrío…
A pesar de todo: SUEÑO, porque soñar no cuesta nada y alivia mi pensamiento, porque quizás mi sueño pueda cumplirse, porque soñar me hace feliz.
A pesar de todo: LLORO, porque llorar purifica mi alma y alivia mi corazón, porque mi angustia decrece, aunque solo sea un poco, porque cada lágrima es un propósito de mejorar mi existencia.
A pesar de todo: AMO, porque amar es vivir, porque si amo quizás reciba amor, porque prefiero amar y sufrir, que sufrir por no haber amado nunca.
A pesar de todo: COMPARTO, porque al compartir crezco, porque mis penas compartidas disminuyen, porque mis alegrías se duplican.
A pesar de todo: ¡Sonrío, sueño, lloro, comparto, vivo, pienso en todos mis amigos! Porque cada día doy gracias a Dios ya puedo hacer estas cosas. Doy gracias a Dios porque me da la oportunidad de vivir un día más.
Doy gracias a Dios por permitirme compartir contigo esta pregunta.
Así que amigo mío: “QUE TUS MOMENTOS SEAN DE PAZ Y TODOS LOS DÍAS SEAN GRANDIOSOS”.
.