En un Juzgado de Familia y en una demanda de divorcio, el Juez le pregunta a la demandante.
Señora, ¿está Usted segura de lo que está pidiendo?
Es que aquí me pide que se decrete el divorcio, “por compatibilidad de caracteres”. ¿No será lo contrario?
No, señor Juez. El divorcio que pido es por compatibilidad, pues:
A mí me gusta el cine. Y a mi marido también.
A mí me gusta ir a la playa. Y a él también.
A mí me gusta el teatro. Y a él también.
A mí me gustan los hombres… Y a él también.
Jajajajajajajajajajajajá.
.