Estamos en un nuevo tiempo.
Los cambios vienen a tu vida constantemente, son inevitables, no te quedes rezagado.
Reinvéntate, actualízate. No camines, corre, porque este tiempo es acelerado.
No te sigas quejando, abandona ese pensamiento que te retrasa y dispone al movimiento que Dios está haciendo en tu vida.
Hay nuevas oportunidades, nuevas formas y nuevos resultados. ¡Avanza, Esto aún no ha terminado para ti!
.