En un circo, en los años 50's, sucedió un caso en particular, que fue reconocido a nivel mundial como el caso de los títeres humanos.
Albert Leanes era un fabricante de muñecos, muy reconocido. Sin embargo, sus muñecos ya tenían defectos, y sus productos, eras pocos los que lo compraban. Además de eso, estaba en bancarrota.
Albert, decidió ir al circo, ya que tenía una idea muy buena. Se presentó en las oficinas del dueño del circo y sólo le dijo: Permítame presentar mi espectáculo, no se arrepentirá.
El día de la presentación, todo el público quedó fascinado, pues sus títeres, tenían una apariencia humana y sus movimientos eran tan naturales que parecía que en verdad hablaban ellos, mientras tanto, los ayudante de Albert, notaban que sus títeres olían a podrido, y éstos desaparecían al día siguiente, después del espectáculo.
En cada cuidad, Albert utilizaba un títere diferente, hasta que un día, una chica apareció en la multitud, y dijo que el títere era su marido muerto.
Todos quedaron asombrados con la acusación, pero Alberto les mostró a todos que era un simple muñeco, pues éste sacó su mano de interior, abrió al muñeco, y le sacó lana y aserrín del interior, pero ahí no paró todo.
En las siguientes ciudades, había acusaciones de que Albert, había sacado cadáveres de sus tumbas, para hacer sus títeres. Albert, se retiró del circo y se fue a vivir con su familia...
Después de tres años, se dieron cuenta de que Albert, había sacado los cadáveres de su familia, de sus sepulturas.
La policía, se enteró de lo que hacía Albert por los vecinos y cuando llegaron los oficiales a su casa, vieron que su familia, eran títeres vacíos, sólo piel y mecanismos, para simular mover los labios. Entre sus familiares, encontraron varios niños y un anciano de 79 años.
Cuando esto se descubrió, Albert fue encontrado ahorcado en el sótano de la casa. Y entre sus manos, tenía una nota que decía: "Ellos, sí se mueven, a pesar de que yo les quité las vida".
DATO PERTURBADOR: Según la investigación, su familia fue asesinada, un mes antes de entrar al circo. Los usaba, como "muñecos de entrenamiento", para mejorar su espectáculo.
De éste incidente, fue sacada la película "El títere", también llamada, "Silencio maldito". (Crédito a quien corresponda).
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