Se los pregunto, porque a mí siempre me enseñaron lo siguiente:
No llores por lo que perdiste, sino lucha por lo que te queda.
No llores por lo que ha muerto, más bien lucha por lo que ha nacido en ti.
No llores por quien se ha marchado, lucha por quien está contigo.
No llores por quien te odia, sino que más bien lucha por quien te quiere.
No llores por tu pasado, lucha por tu presente.
No llores por tu sufrimiento, sino lucha por tu felicidad.
Porque amigo mío, con las cosas que a uno le suceden, vamos aprendiendo que nada es imposible de solucionar.
Así que solo sigue adelante…
.